El Té Verde, fue considerado en la antigua China, como una medicina eficaz contra el cansancio, el dolor de cabeza, la falta de concentración y los problemas reumatológicos. “El Té alivia el cansancio, fortalece la voluntad, deleita el alma y anima la visión”, decían los orientales.
Muchos años después, y ya en el siglo XXI, la investigación científica ha divulgado estudios en profundidad de los beneficios en la salud asociados a la planta de Té: la camellia sinensis.
Todos los tipos de Tés provienen de esta misma planta, y las múltiples propiedades que se le atribuyen a esta bebida son compartidas por todas las variedades, aun cuando, estos beneficios pueden verse potenciados o disminuidos según los procesos de manufacturación que experimenta cada tipo.
¿Cuáles son las propiedades y beneficios que hacen de este tipo de Té uno de los más consumidos en el mundo?, ¿qué hace al Té Verde tan imprescindible en nuestra dieta diaria?

La planta del Té Verde al no ser fermentada, permite conservar intactas sus propiedades antioxidantes, ayudando a frenar el envejecimiento celular y el avance de algunas enfermedades degenerativas. Los responsables de estos beneficios son los polifenoles, un grupo grande de sustancias químicas presentes en las plantas, entre las que destacan las catequinas y específicamente la llamada EGCG (galato de epigalocatequina). Estas sustancias tiene el potencial de poder reducir la formación de radicales libres en el cuerpo, protegiendo a las células y moléculas del daño. Así lo sostiene un artículo titulado “Capacidad antioxidante del Té: efecto del procesamiento y almacenamiento”, al señalar los efectos que las catequinas y polifenoles tienen secuestrando iones metálicos y eliminando especies reactivas del oxígeno y nitrógeno.

El cáncer, una de las principales causas de muerte a nivel mundial, se produce debido al desarrollo de células anormales, que se dividen, crecen y se esparcen sin control en cualquier parte del cuerpo.
Numerosos estudios científicos, entre los que podemos mencionar el del National Cancer Institute, “Té y prevención de cáncer”, sostienen que las sustancias químicas presentes en el Té y su actividad captadora de radicales libres protegen a las células de sufrir daños en el ADN disminuyendo el riesgo de sufrir algunos cánceres como el de mama, próstata, gastrointestinal, pulmón y vejiga. De acuerdo al NCI, “se ha demostrado en estudios de laboratorio y en estudios con animales que los polifenoles del Té también inhiben la proliferación celular en los tumores y causan. En otros estudios de laboratorio y con animales, se ha observado que las catequinas del Té inhiben la angiogénesis y el grado de invasión de las células del tumor”.

Otro estudio del año 2020, publicado en la revista Food, Science and Nutrition, titulado, “Efectos y mecanismos del Té para la prevención y el tratamiento del cáncer: una revisión actualizada”, sostiene que los estudios experimentales han revelado que las acciones anticancerígenas del Té se deben a su gran cantidad de polifenoles, tales como la epigalocatequina-3-galato y las teaflavinas. “tanto in vitro como in vivo los estudios han demostrado que los posibles mecanismos anticancerígenos son la inhibición de la proliferación, la antiangiogénesis, la inducción de apoptosis, la supresión de la metástasis, la inhibición de las células madre cancerosas y la modulación de la microbiota intestinal.

Numerosas investigaciones han arrojado como resultado la beneficiosa acción que el Té tiene sobre el sistema cardiovascular previniendo y ayudando a disminuir los efectos de enfermedades tales como los accidentes cerebrovasculares, la hipertensión arterial y la aterosclerosis. Algunos de estos estudios, hablan incluso de que se podría retrasarse en 1,23 años la aparición de una enfermedad cardiovascular.

Un estudio de “The American Heart Association's Journal, Circulation”, sugiere que el consumo de dos tazas de Té Verde al día podría disminuir la posibilidad de que las personas mueran de un infarto. Los resultados arrojaron un 44% menos de mortalidad después de un ataque cardíaco entre aquellos que tomaban regularmente Té Verde en comparación a los no bebedores. Por otra parte, los flavonoides presentes en esta bebida, pueden prevenir la oxidación del colesterol malo o LDL, evitando su depósito en las paredes de las arterias.

Otra investigación de la European Journal of Prevention Cardiology, titulado, “Consumo de Té y riesgo de enfermedad cardiovascular aterosclerótica y mortalidad por todas las causas: el proyecto China-PAR”, concluyó luego de estudiar a una población de 100.000 adultos chinos durante un promedio de 7,3 años, que aquellas personas que consumían un promedio de tres tazas de Té Verde a la semana, tenían menos riesgos de enfermedad cardiovascular aterosclerótica y mortalidad, que los no bebedores de Té.

Las múltiples propiedades antioxidantes del Té Verde no nos dejan de sorprender. Un estudio científico de la Universidad inglesa de Newcastle y publicado en la revista Phytomedicine, sostuvo que el consumo regular de Té Verde podría disminuir el riesgo de sufrir enfermedades degenerativas como el alzheimer u otras formas de demencia debido a las propiedades antioxidantes de los polifenoles. Las catequinas, un tipo de polifenol presente en el Té Verde en gran cantidad, actúa contra el estrés oxidativo, inhibiendo enzimas pro-oxidantes que son las que forman los radicales libres. A su vez, inducen también la formación de enzimas antioxidantes.

Estudios como el “Green Tea (Camellia Sinensis): Chemistry and Oral Health”, sugieren que el consumo de Té Verde tiene beneficios sobre afecciones orales como caries, enfermedades periodontales y halitosis. Esta investigación en particular, concede al Té Verde propiedades en la reducción de la actividad bacteriana en la boca además de la disminución de las posibilidades de desarrollar cáncer oral en personas fumadoras.

Artículos publicados en el International Journal of Sport Nutrition and Exercise Metabolism y Cochrane Review, hablan del efecto que podría tener el Té Verde en la pérdida de peso y aumento del metabolismo debido a su contenido de cafeína, catequinas y polifenoles, que facilitan la digestión, regulan el intestino y ayudan con la retención de líquidos. Si bien los estudios no son concluyentes, la recomendación es incluir el Té Verde en la dieta diaria junto con cambios en la alimentación y la práctica de ejercicio.

Investigadores de la Universidad Estatal de Washington cuyas conclusiones fueron publicadas en la revista médica Arthritis and Rheumatology, identificaron propiedades antiinflamatorias en el Té Verde, propiedades que servirían para disminuir el dolor en las articulaciones y el deterioro del tejido causado por la artritis.
Ahora que conoces la gran cantidad de propiedades y beneficios que tiene el Té Verde no tendrás excusa para no incorporarlo en tu rutina diaria. No es casualidad que hace más de 5000 años los monjes budistas lo consideraran el “elixir de la juventud eterna”. ¡Qué esperas para probarlo!

En Adagio tenemos una gran variedad de Tés Verdes de origen chino y japonés. Si te gustan los Tés saborizados, el Té Verde frambuesa y su combinación de ácido y dulce se convertirá en uno de tus favoritos. Si te gustan las variedades puras, el gunpowder, de origen chino y el sencha, de origen japonés, son excelentes alternativas para disfrutar de un Té de excelente calidad y con todos los beneficios asociados.